Misioneras Oblatas de María Inmaculada
Estamos solo a 8
días de un acontecimiento muy importante en
nuestra familia religiosa Oblata tanto
las Oblatas como los Oblatos.
Quiero expresar
mi gratitud al Señor… por regalarnos la vocación de consagrar la vida al Señor
desde la Espiritualidad de San Eugenio… viviendo con toda nuestra capacidad
afectiva… el carisma Oblata.
Quiero partir
desde lo que es el Ideal Oblato
“El que quiere ser de los nuestro s, deberá
arder en deseo de la propia perfección, estar inflamado en amor a Nuestro Señor
Jesucristo y a su Iglesia, y el celo ardiente por la salvación de las Almas…”
El Ideal Oblato…. Es la luz de la gran
Misión que nos ha confiado el Señor por puro
amor…por esta razón hoy quiero decir que mi corazón se llena de inmensa alegría por
la hna. Myrian por la disponibilidad y
generosidad de su vida para consagrar totalmente y para siempre, su vida al
servicio de la Iglesia y formando parte de la gran obra del Señor en nuestra
humilde congregación Oblata…
Querida Hna. Myrian nuestra consagración nos
hace cada día más disponible a la llamada del Señor…y nuestro ser Misioneras
Oblatas de María Inmaculada, lo heredamos de nuestro Santo fundador San Eugenio
de Mazenod, él mismo nos hace parte de su gran corazón… por eso estamos
felices… porque también esta vocación es compartir, es generosidad, es
fraternidad, porque celebraremos juntos la alegría de ser totalmente y para siempre al Señor
como Oblata con muchas personas que te
aman, es muy significativo este acontecimiento que con tanta alegría juntos con Gualberto unidos en Jesucristo y la
Madre María Inmaculada celebraremos este
gran acontecimiento para la Iglesia y la Congregación, mediante esa experiencia de amor con Jesucristo y el
celo por la salvación de las almas.
Me acuerdo cuando en febrero recurrimos junto
a nuestro Arzobispo, para pedir
realizar este acontecimiento parecía muy lejos, más aun recurrimos tímida
y temblorosa... pero, cuando él nos
ánima y nos confirma que nuestra vida y existencia Oblata es una gracia especial para la Iglesia, que lo más importante era nuestra
consagración y entrega generosa para la misión en la cual el Señor nos
llamó… “los demás vendrá por añadidura”… y esa bendición y oración tan profundo
que el Monseñor elevó por ti y la
congregación hace que cada día que pasa vamos asumiendo con alegría y
responsabilidad nuestra labor cotidiana… el encuentro con las personas de
Jesucristo nos da sentido este gran
acontecimiento… me da mucho gozo y
disfruto de esa misericordia de Dios, y la
alegría que se refleja en ti y que estas
gozando compartimos contigo y nos
regocijamos por ti, por tu valentía y audacia Misionera . Hoy nada más
faltan solos días y horas para
que proclame a Dios como María “Aquí está la esclava del Señor… Hágase en mi
según tu voluntad…”
Estoy segura que la bendición te acompaña por
medios de muchas personas que reza y te acompaña en esta decisión que has
tomado… Ser Religiosa es dejar a unos posibles hijos, perderse en el vacío
bosque de la nada para abrazar a Cristo en el calvario, ese monte donde solo
se engendran almas. Es renunciar a tener una familia como propia con el único
anhelo de que todo te llamen: MADRE!, de que todos te griten HERMANA!,
de que todos te griten la Misionera
Oblata de María alegre que ama a los pobres… Ser religiosa es todo eso y
mucho más, y por eso agradezco a Dios la gracia de además de ser mi hermana.
Felicidades hna. Myrian
OMI, Por tu sí, vamos adelante
Dios nos ama y el mismo promete que estará con nosotros todos los día…!!! Se feliz !!! Porque somos Oblatas de María
Inmaculada.!!!
Hna.
Eugenia Iturbe OMI
Superiora
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